10 formas de grabar mejor la batería
1. Parches, baquetas y golpeadores
Es mucho más fácil conseguir volumen, claridad y brillo con un par de parches nuevos. Si es posible, póntelos, afínalos y «tócalos» uno o dos días antes de la sesión.
Cada tipo de parche produce un sonido diferente: los de una capa son brillantes y tienen menos sustain (jazz/ pop); los de dos capas son más profundos y controlados (rock/metal); los recubiertos tienen un tono más cálido (disco/70).
La elección de baquetas o hotrods y golpeadores de fieltro o madera también influirá mucho en el sonido del kit. Acércate al sonido que quieres antes de pensar en los micrófonos.
2. Afinar
Esto debería ser responsabilidad del batería. Aquí tienes algunos consejos de afinación y cosas que debes comprobar si tienes problemas:
- Comprueba que el diámetro del parche es exactamente el correcto (una fracción más grande que el tambor) y que está montado perfectamente centrado.
- Realice siempre los ajustes de tensión en pares opuestos para evitar que el parche quede descentrado.
- Asiente el cabezal aplicando una suave presión con la palma de la mano en el centro y, a continuación, afine las nuevas arrugas que aparezcan
3. Cabezas inferiores en los toms
Siempre que haya dos cabezas, hay tres posibilidades. Si afinas la cabeza inferior (resonador) de un tom al mismo tono que la cabeza superior (bateador), obtendrás un tono más puro con más sustain, perfecto para el jazz y sus derivados.
Si afina el resonador más bajo, obtendrá una ligera caída del tono y menos decaimiento, lo que es ideal para el rock.
Si afinas el resonador más alto, el decaimiento se acorta aún más, lo que puede ser ideal para microfonía cercana. Un buen intervalo inicial para la diferencia de tono entre cabezales es una tercera menor, es decir, tres semitonos en ambos sentidos.
4. Aprieta el bombo
Es posible crear una pequeña cámara para el bombo utilizando mantas, edredones o incluso un abrigo. Se colocan sobre el bombo y los micrófonos se colocan dentro y delante de él. Utiliza un par de pequeños pies de micro para sujetar las mantas.
La cámara evita que los platillos y la caja se cuelen en los micros del bombo, lo que facilita el aumento de las frecuencias altas en la fase de mezcla y, por lo tanto, mejora el «chasquido» sin añadir la dureza de los platillos.
5. ¿Cabezal delantero en el bombo o no?
El parche frontal (resonador) del bombo es importante para crear un tono bueno y carnoso. A los jazzistas les encanta, y la mayoría de los rock/popper tienen un orificio para colocar micrófonos y material de amortiguación (una pequeña manta, por ejemplo).
Para los estilos de metal, en los que se busca sobre todo el clic y el ruido sordo, lo mejor es quitar el cabezal delantero para poder colocar un micro justo en la punta del batidor.
6. Tocar con un clic
Si estás haciendo un seguimiento de una grabación existente, es posible que necesites poder tocar en una pista de clic. Los mejores bateristas son capaces de sentarse exactamente en el clic, pero tienden a fluir a su alrededor con el fin de crear una mejor sensación. Grabar en una pista de clic facilita mucho la edición posterior entre tomas de batería.
Si toda la banda está grabando junta, lo mejor es que sólo el batería haga el clic. Usar un poco de beatbox o un groove de percusión suele hacer mejor ‘clic’ que un clic real, y además salpicará menos a los micrófonos.
7. Prepara el clic para los huecos
Prepara las paradas y los huecos de la canción automatizando el nivel del clic en los auriculares. Durante las paradas, baja el volumen para que no haya salpicaduras de clic en los micros de batería desde los auriculares.
Si estás grabando a toda la banda, también es buena idea enviar un clic a los demás músicos en ese momento, para no tener que volver a contar a todos. Esto te ahorrará mucho trabajo de edición y corrección más adelante.
8. Consigue un micrófono cutre
Los magnetófonos solían venir con micrófonos de condensador o electret incorporados. Pon una de estas viejas máquinas en modo grabación/pausa y lleva la salida a tu DAW para conseguir un sonido excitante y supercrujiente.
A veces, los viejos micros a pilas también suenan bien. Coloca este tipo de micros en un lugar donde se pueda oír todo el kit. Las esquinas de la habitación pueden ofrecer resultados interesantes: ¡experimenta!
9. Graba sin platillos
Grabar un kit en un espacio difícil y sin el equipo ideal puede ser una experiencia fructífera y gratificante, pero aún así puedes tener la sensación de que tus resultados suenan a aficionado.
Uno de los problemas clásicos del sonido de la batería es el exceso de derrame de platillos. Esto ocurre en los mejores estudios y, cuando ocurre, los profesionales se limitan a grabar los crashes después. De este modo, puedes realzar toda la emocionante amplitud de la propia batería en la mezcla y mezclar después los platillos perfectamente grabados.
10. Accesorios esenciales para una sesión de batería sin problemas
Aquí tienes una lista de los accesorios que no pueden faltar en una sesión de batería…
- Moon Gel, para amortiguar
- Aceite 3 en 1, para los pedales chirriantes
- Una llave de batería, porque el baterista olvidará la suya
- Una llave ajustable, para los soportes ruidosos
- Cinta adhesiva, para sujetar cosas
- Cinta adhesiva, para fijar materiales de amortiguación y similares
- Paquetes de cigarrillos vacíos y J-Cloths, para ese sonido de los 70.
- Mantas
- Peso de escenario o saco de arena
- Palillos de cocina japoneses: ¡geniales para las piezas de tom!